Hombres y Mujeres para admirar, apoyar e imitar

Con más de 70 años de vida, representa una serie de experiencias vividas, sabiduría que va transmitiendo sus conocimientos a las nuevas generaciones para combatir la vulnerabilidad y pobreza en Bolivia, es parte de una población que se encuentra en la mayoría de los casos, abandonada y con poca o ninguna ayuda, para culminar sus últimos años de vida de una manera digna y respetuosa.

Buscando la solución a este problema social y humano, Naciones Unidas a través de su Programa de Pequeñas Donaciones, ejecutado por la Fundación Conservación y Desarrollo Bolivia (FCDB), desarrolla proyectos de Fortalecimiento comunitario, para la conservación y gestión sustentable de los recursos naturales, Mejora y ampliación del acceso al agua para riego en huertos familiares y parcelas en la Comunidad de Motacucito en la zona de amortiguamiento del PN-ANMI Pantanal de Otuquis y Promover la adecuación e implementación del Plan de manejo del proyecto conservación y uso sostenible del lagarto (Caimán yacaré) en la Laguna Cáceres, PN-ANMI Otuquis – Municipio de Puerto Suárez, para la COPEGEB, en el marco de la normativa vigente del Programa Nacional del lagarto C. yacaré en el territorio nacional.

Por ejemplo, en la comunidad de Motacusito Nuevo aproximadamente 15 familias han implementado una huerta de hortalizas y verduras con sistema de riego por goteo y semisombra con una producción orgánica libre de uso de agroquímicos. El mismo ya cuenta con un ambiente para el lavado de sus verduras utilizando Ozono y el empacado de forma limpia para su comercialización al mercado local y de Puerto Suarez.

Don Carmelo retirado de 79 años. Actualmente, él es parte del grupo de productores de hortalizas es además uno de los ancianos beneficiados con esta iniciativa. Contento y satisfecho con las mejoras y el equipamiento del Huerto, rememora cuando trabajaba en la Empresa Nacional de Ferrocarriles y que de muy joven salió de su hogar para llegar hasta Motacusito Nuevo y trabajar en la maestranza ubicada en esta comunidad, hoy ya no opera la maestranza y con sus compañeros apoya a las señoras y jóvenes del lugar para quienes es un incentivo para imitarlo y generar ingresos que es lo que más necesitan para llevar el pan del día y cubrir las necesidades básicas de cada familia.

La Fundación Conservación y Desarrollo Bolivia, encara una tarea de colaboración desprendida que está mejorando la calidad de vida de las Comunidades en Bolivia. Esta iniciativa busca alivianar la expulsión de población, conquistando sonrisas en medio de las arrugas y la tristeza, y mejorar los ingresos de sus habitantes para que puedan vivir con respeto, dignidad y cariño.